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Los cogollos son mucho más de lo que crees. De hecho, lo que conoces como “cogollos” no son verdaderas flores de cannabis. Ah, y esos pelillos que sobresalen de los cogollos probablemente los conocerás como pistilos, ¿verdad? Pues realmente se llaman estigmas. Descubre la anatomía de los cogollos y verás las plantas de cannabis con otros ojos.
Índice:
- ¿En qué parte de la planta de cannabis se forman los cogollos?
- Las diferentes partes de un cogollo de marihuana
- Flores femeninas de cannabis vs flores masculinas
- Cogollos sativa y cogollos índica
- Cogollos densos y cogollos aireados
- ¿Qué significan los colores de los cogollos?
- Formación de semillas en los cogollos
- Cogollos de marihuana: profundizando en su nomenclatura
Probablemente, en algún momento ya te habrás familiarizado con los cogollos de marihuana. Tanto si has contemplado cómo se forman durante la fase de floración, como si simplemente los has tenido en tus manos antes de fumarlos, sabrás un par de cosas sobre ellos. Son olorosos y pegajosos, y tienen una capa escarchada y unos pelillos peculiares.
Pero, más allá de estas simples características, los cogollos son muy complejos. Producen y almacenan la mayoría de fitoquímicos que hacen que el cannabis sea tan apreciado, incluyendo los cannabinoides y terpenos. Además, anatómicamente tienen varios componentes que son difíciles de distinguir a simple vista.
¿En qué parte de la planta de cannabis se forman los cogollos?
Si cultivas marihuana, sabrás exactamente dónde se forman los cogollos en la planta. Las colas, también conocidas como cogollos principales, se forman en la punta de las ramas. En las plantas que no han sido entrenadas o no se han podado apicalmente, se forma una gran cola central en la parte superior de la planta, que tiene forma de árbol de Navidad. Esta cola central puede variar mucho en tamaño según la genética de la planta y las condiciones del entorno de cultivo.
Las plantas también producen muchos cogollos pequeños, que suelen llamarse **cogollos popcorn porque su forma recuerda a palomitas de maíz. Estos cogollos se forman en los nudos, la zona donde las ramas se unen al tallo principal, o debajo de las ramas inferiores de la planta.
Las diferentes partes de un cogollo de marihuana
Los cogollos a menudo se denominan incorrectamente como flores de cannabis. Pero realmente los cogollos son inflorescencias, es decir, unas estructuras florales formadas por tallos, brácteas y flores.
Las verdaderas flores del cannabis[1] se conocen como pistilos. En botánica, la palabra pistilo se refiere al órgano reproductor femenino de una flor, donde se produce la polinización. Las flores pistiladas[2] del cannabis (flores femeninas) están compuestas por dos estigmas, un estilo y un óvulo protegido por brácteas recubiertas de tricomas. Una agrupación de flores pistiladas constituye lo que la mayoría de gente conoce como cogollo.
A continuación, veremos la anatomía de las flores pistiladas y los cogollos. Abarcaremos todas las zonas importantes, empezando por la más pequeña hasta la más grande.
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Cálices
Muchos cultivadores de marihuana suelen confundir las brácteas con los cálices. Pero las flores de cannabis no tienen un cáliz diferenciado. Sin embargo, tienen células de cálices que se encuentran dentro del perianto, un tejido translúcido que envuelve parcialmente el óvulo (el lugar donde se desarrollarán las futuras semillas).
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Tricomas
Los tricomas son unas glándulas que dan a los cogollos su aspecto escarchado. A simple vista no parecen gran cosa, pero de cerca adoptan varias formas diferentes, que incluyen:
- Tricomas bulbosos: pequeños y redondos
- Tricomas capitados-sésiles: tienen una cabeza globular grande, sobre un tallo corto
- Tricomas capitados-pedunculados: este tipo de tricomas tiene una cabeza más grande, sobre un tallo más largo
Entre estos, los tricomas capitados-pedunculados son los principales productores de los metabolitos secundarios deseables (como los cannabinoides y terpenos). Producen estos compuestos en discos secretores y los almacenan en cavidades subcuticulares. Los tricomas producen estos compuestos por varias razones, como proteger las plantas de los insectos y los rayos UV.
secretory discs and store them in subcuticular cavities. Trichomes produce these compounds for several reasons, including protecting plants from insects and UV rays.
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Estigmas
La cultura del cannabis ha creado cierta confusión en lo que respecta a los estigmas de las plantas de marihuana. Cada flor pistilada individual produce dos estigmas que sobresalen hacia arriba.
Estas estructuras, similares a pelillos, suelen recibir el nombre de pistilos por parte de los cultivadores; pero realmente no son pistilos, sino que solo son una parte del pistilo. Los estigmas están cubiertos de unos pequeños pelos llamados papilas, que ayudan a atrapar el polen masculino del aire. Cuando esto sucede, el polen se adhiere al estigma femenino y transfiere el material genético, dando lugar a la fecundación de la flor. Durante la fase de floración, los estigmas inicialmente tienen un color blanco, y poco a poco se tornan de color naranja/marrón.
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Brácteas
Básicamente, las brácteas son unas pequeñas hojas que envuelven parte del pistilo para protegerlo; concretamente, envuelven el óvulo, el estilo y la parte inferior de los estigmas. Dado que protegen estructuras tan valiosas, las brácteas son la parte de un cogollo dotada de una mayor concentración de tricomas. Las brácteas son el principal componente de los cogollos manicurados.
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Pistilos
Salvo que sepas de botánica, probablemente uses la palabra “pistilos” para designar a los pequeños pelillos que sobresalen de los cogollos. Pero esto es un error muy extendido, que confunde los estigmas con todo el pistilo. Los estigmas no son más que una parte del pistilo (que es el órgano reproductor femenino), junto con el estilo y el óvulo.
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Hojas de azúcar
Las hojas de azúcar son unas hojitas que se forman en la inflorescencia del cannabis. Aunque son mucho más pequeñas que las hojas de abanico que se encuentran en otras partes de la planta, cumplen una función importante. Al ser estructuras fotosintéticas, son capaces de producir azúcares justo donde se necesitan, cerca de los cogollos.
También son plataformas donde se acumulan los tricomas, por lo que ofrecen protección contra las plagas, los depredadores y el estrés abiótico. Tras la cosecha, los cultivadores quitan las hojas de azúcar de los cogollos, ya sea antes o después de secarlos. Aunque no tienen tantos tricomas como las brácteas, muchos cultivadores las aprovechan para hacer productos como el hachís.
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Colas
Las colas son los cogollos que se forman, concretamente, en la punta de las ramas. Son las mayores agrupaciones de flores pistiladas en cualquier parte de la planta. Cuando las plantas de cannabis se dejan crecer sin aplicarles técnicas de entrenamiento ni podarlas apicalmente, desarrollan grandes colas centrales, similares a columnas, que pueden tener un peso impresionante.
Flores femeninas de cannabis vs flores masculinas
Al ser una especie dioica, la marihuana tiene plantas masculinas y plantas femeninas. Mientras que las hembras desarrollan flores pistiladas (con dos estigmas dentro de una bráctea), las flores masculinas están formadas por los siguientes componentes:
- Estambre: el órgano reproductor masculino de una flor, donde se produce el polen
- Anteras: la parte del estambre que produce el polen
- Filamentos: unas estructuras que sostienen las anteras
- Sépalos: unos tejidos dentro de los cuales se desarrollan los estambres
Al principio de la floración, las flores masculinas del cannabis parecen unos saquitos. Con el tiempo, los sépalos se abren y las anteras empiezan a liberar polen para fecundar las flores femeninas.
Cogollos sativa y cogollos índica
Al igual que ocurre con algunos aspectos de la botánica del cannabis, hay cierta confusión en cuanto a la dicotomía sativa/índica. A lo largo de los años, las empresas han perpetuado la idea de que las variedades índica y sativa producen efectos concretos. Por eso, las sativas se asocian a un efecto energizante, mientras que las índicas se asocian a un colocón relajante.
Pero lo cierto es que la cosa es mucho más compleja. Aunque el THC provoca los efectos principales de cada variedad, los terpenos aromáticos también contribuyen a los diferentes efectos. Por ejemplo, una planta sativa podría producir principalmente terpenos energizantes, pero no tiene por qué ser siempre así.
Dicho esto, las plantas índica y las plantas sativa sí se diferencian en su morfología. Las variedades sativa son más altas y sus hojas de abanico tienen unos folíolos más finos; las índicas son más bajas y tienen unos folíolos más anchos. Además, las variedades índica suelen producir cogollos más pequeños y compactos, mientras que los cogollos sativa suelen ser más grandes y esponjosos.
Cogollos densos y cogollos aireados
La densidad de los cogollos depende de varios factores. Como acabamos de comentar, la genética juega un papel importante. Pero, en algunas circunstancias, la densidad de los cogollos puede ser un indicador de la calidad de la hierba.
Si las plantas crecen en condiciones adecuadas (en cuanto a luz, fertilizante, temperatura y humedad), es más probable que formen cogollos densos y cargados de cannabinoides. Asimismo, si las plantas no crecen en buenas condiciones, pueden producir cogollos esponjosos de baja calidad, con menos cannabinoides y terpenos.
¿Qué significan los colores de los cogollos?
Los cogollos pueden tener varios colores diferentes. Algunos se deben a la propia genética de la planta, mientras que otros se deben a los factores del entorno. Estos colores incluyen:
- Verde: la mayoría de cogollos son verdes, por su contenido en clorofila.
- Púrpura: algunos cogollos adquieren un color morado debido a la presencia de antocianina, un pigmento flavonoide.
- Blanco: a veces, los cogollos pueden parecer blancos por la presencia de estigmas inmaduros y una gran cantidad de tricomas.
- Naranja: a medida que los estigmas maduran, los cogollos empiezan a mostrar unos llamativos tonos naranjas y verdes.
Formación de semillas en los cogollos
La formación de semillas en los cogollos es algo que la mayoría de cultivadores quiere evitar. ¿Por qué? Porque, a no ser que hayan cruzado las plantas intencionadamente, las semillas echan a perder la calidad de los cogollos. Tras la polinización, el óvulo que se encuentra dentro de la bráctea empieza a hincharse hasta convertirse en semilla. Esto hace que las plantas centren sus recursos en la reproducción, por lo que destinarán menos energía a la formación de cogollos grandes, cargados de cannabinoides y terpenos.
Cogollos de marihuana: profundizando en su nomenclatura
Enhorabuena, ahora ya conoces más a fondo la anatomía de los cogollos. De aquí en adelante, cada vez que veas un cogollo no verás un único elemento, sino que verás flores pistiladas individuales, estigmas, tricomas, brácteas protectoras y hojas de azúcar productoras de energía.
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