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¿Podría la marihuana tratar la ateroesclerosis?
Las pruebas actuales indican que los cannabinoides ayudan a prevenir la ateroesclerosis, una enfermedad de la arteria coronaria causada por la inflamación. Los cannabinoides actúan como agentes antiinflamatorios que ayudan a regular el sistema inmunológico. El desarrollo de la ateroesclerosis se entiende mejor a través de sus complicaciones.
¿QUÉ ES LA ATEROESCLEROSIS?
La inflamación es una respuesta protectora natural ante la infección. Su propósito es eliminar los patógenos o el tejido dañado, aunque es muy importante supervisar con cuidado la zona perjudicada. Si la inflamación persiste más tiempo del necesario, podría causar daños al cuerpo. La enfermedad inflamatoria de la aterosclerosis, también conocida como enfermedad de la arteria coronaria (EAC), es un factor contribuyente a la aparición de graves afecciones cardíacas como los accidentes cerebro vasculares y los ataques al corazón.
La ateroesclerosis se caracteriza por el endurecimiento y estrechamiento de las arterias, que a su vez reducen el flujo sanguíneo que llega al corazón y al cerebro, y está causada por una acumulación de placa aterosclerótica en las arterias. El revestimiento interno de las arterias está compuesto de grasa, colesterol y otras sustancias de la sangre, y se conoce como endotelio. A medida que se acumula la placa, la respuesta inflamatoria del sistema inmune causará más daño a las arterias. Podría darse una obstrucción parcial o total que detenga el flujo sanguíneo en las arterias del cerebro, la pelvis, el corazón, las piernas, los brazos y los riñones, y que esté causada por las placas obstructivas. Cuando esto sucede, el sitio en el que se forma la placa es el que va a determinar el tipo de enfermedad coronaria que sufre el paciente. Entre ellas se incluyen:
- Enfermedad coronaria
- Angina
- Enfermedad de la arteria carótida
- Enfermedad arterial periférica
- Enfermedad renal crónica
La etapa temprana de la ateroesclerosis podría no presentar síntomas visibles durante varios años. La podemos comparar con un problema de fontanería. Para que te hagas una mejor idea, imagínate una cañería atascada con sedimentos que bloquean cualquier cosa que intente pasar. Puede que no sea una comparación perfecta con respecto a la ateroesclerosis, ya que las acumulaciones no solo se forman entre las paredes de las arterias, sino también dentro de ellas. Aun así, te puedes hacer una idea aproximada. Con el tiempo, si la enfermedad progresa, llegará a un punto en el que presentará ciertos síntomas que se pueden experimentar durante la actividad o en reposo:
- Dolor torácico (varía para hombres y mujeres)
- Dolor que se irradia por todo el cuerpo
- Falta de aliento
- Dificultad para respirar
- Fatiga limitante
- Sudoración
- Náuseas
- Palpitaciones
- Pérdida de la consciencia
No se sabe qué causa la ateroesclerosis, pero fumar, la hipertensión, un nivel alto de glucosa y un colesterol elevado, podrían contribuir a su aparición. Por ejemplo, cuando el "colesterol malo" se acumula en las paredes de la arteria coronaria, el organismo envía glóbulos blancos y otras células a la zona tóxica. Con el paso de los años, se podría desarrollar una protuberancia en la pared arterial que obstruya el flujo sanguíneo. Esto causará la formación de placas. Los enfermos toman una variedad de medicamentos para tratar esta enfermedad, entre los que se incluyen anticoagulantes y estatinas que se suelen usar para reducir el nivel del colesterol. Si bien estos fármacos podrían salvar vidas y prevenir futuros eventos cardíacos, son relativamente efectivos y tienen efectos secundarios. Estos incluyen:
- Sangrado prolongado
- Sangrado de encías
- Sangrado nasal
- Sangre en la orina o heces
- Menstruación excepcionalmente abundante
La literatura científica indica que compuestos psicoactivos como el THC tienen una enorme influencia y un efecto beneficioso sobre las células del sistema inmune. El THC reduce la secreción de sustancias proinflamatorias y su migración a la pared arterial.
CANNABINOIDES Y ATEROESCLEROSIS
Para determinar el papel de la marihuana en la prevención de la enfermedad coronaria ateroesclerótica, primero debemos entender cómo funcionan los receptores cannabinoides del sistema endocannabinoide. El sistema endocannabinoide está compuesto de receptores cannabinoides y desempeña un papel fundamental en el mantenimiento de una función celular adecuada en los diferentes sistemas del cuerpo. Básicamente, hay dos principales receptores de células que componen el sistema endocannabinoide: los receptores cannabinoides 1 y los receptores cannabinoides 2. Los receptores CB1 se encuentran principalmente en las neuronas y son los responsables del efecto psicotrópico de la sustancia química, mientras los receptores CB2 son más abundantes y se encuentran sobre todo en las células inmunitarias.
También hay numerosos receptores cannabinoides en la superficie de las células del cuerpo humano. Los principales órganos, como el cerebro, el corazón, el hígado y las células vasculares del músculo liso (VSMC), poseen receptores CB1. Unas pequeñas moléculas lípidas producidas de forma natural en las membranas de las células y conocidas como endocannabinoides (endo significa "dentro de") activan estos receptores y actúan como el THC natural del cuerpo. Los endocannabinoides se sintetizan según la necesidad, es decir, se producen y utilizan en momentos puntuales, en lugar de ser almacenados para su uso posterior como muchas otras moléculas biológicas del cuerpo.
Cuando se consume cannabis, el compuesto psicoactivo THC interactúa con los receptores CB1 y CB2 del cuerpo. Los cannabinoides se unen de inmediato a los receptores CB2 y combaten la ateroesclerosis produciendo cambios en los mensajes del cerebro y regulando la circulación de la sangre y la función cardíaca.
PRUEBAS CON RATONES
Un estudio[1] llevado a cabo por François Mach demostró que los compuestos del cannabis son beneficiosos para los vasos sanguíneos y frenan la progresión de la ateroesclerosis en ratones. En este estudio, se suministró a un grupo de ratones una dieta rica en colesterol durante 11 semanas, con el objetivo de obstruir sus arterias. A mitad de la dieta, en la semana 6, algunos ratones recibieron por vía oral 1mg de THC diario, lo que produjo unas mejoras muy significativas.
Se comprobó que el compuesto psicoactivo predominante, THC, inhibió la progresión de la enfermedad a través de su efecto pleiotrópico (algo que también consiguen las estatinas) en las células inflamatorias. Posteriormente, los hallazgos revelaron que los ratones que recibieron THC tenían un menor nivel de obstrucción de los vasos sanguíneos que el resto. Cuando se utilizó otro fármaco para bloquear los receptores CB2 de los ratones, el THC no pudo impedir la acumulación de depósitos grasos en las arterias de estos animales. Y en cuanto a los receptores CB1, la dosis de THC administrada por vía oral no fue lo suficientemente elevada como para producir efectos psicoactivos. Durante el tratamiento, ningún ratón presentó un comportamiento anómalo. Según los investigadores del departamento de cardiología del Hospital Universitario de Ginebra, en Suiza, entre los que se incluye a Mach, estos resultados podían deberse a las propiedades antiinflamatorias del THC. El Dr. Mach cree que las investigaciones futuras sobre el cannabis y las enfermedades inflamatorias se centrarán en encontrar fármacos que imiten los beneficios del cannabis sin producir sus efectos sobre el cerebro.
REFLEXIONES FINALES
Tal vez sean necesarios más estudios sobre el consumo de cannabis y la prevención de enfermedades coronarias. Puede que el consumo recreativo de marihuana no sea la mejor forma de beneficiarse de las propiedades medicinales de la planta. En otros estudios[2], se ha averiguado que el consumo de cannabis aumenta el riesgo de sufrir complicaciones cardiovasculares y coronarias. El consumo de marihuana acelera el ritmo cardíaco y la presión arterial de pie, y la reduce estando acostado. Por eso se sugiere la marihuana medicinal, porque muchos estudios también demuestran que varios cannabinoides tienen sus propios efectos sobre la ateroesclerosis.
Afortunadamente, todavía hay esperanza para los que desean regular y prevenir de forma natural los problemas causados por la placa arterial sin recurrir a medicamentos tradicionales. Los médicos están recetando comestibles y vaporizadores, ya que están considerados como una forma más segura y saludable de consumir marihuana, especialmente para personas que ya están enfermas. También se pueden llevar a cabo ciertos cambios en el estilo de vida para combatir la ateroesclerosis. Es muy importante:
- Controlar el colesterol de forma habitual
- Seguir una dieta pobre en grasas saturadas, y baja en colesterol y sodio
- Hacer ejercicio a menudo
- Mantener un peso saludable para reducir factores de riesgo como la hipertensión
Fuentes Externas
- The role of the endocannabinoid system in atherosclerosis. - PubMed - NCBI https://www.ncbi.nlm.nih.gov
- Marijuana Use and Cardiovascular Disease. - PubMed - NCBI https://www.ncbi.nlm.nih.gov
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Este contenido está destinado únicamente a fines educativos. La información ofrecida procede de investigaciones recopiladas por fuentes externas.