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By Luke Sumpter

La idea de fumar hierba es bastante sencilla. Te haces un porro, lo enciendes, le das dos caladas profundas y se lo pasas a la siguiente persona. Bastante sencillo, ¿verdad?

Sin embargo, mucha gente parece dar algunos pasos en falso por el camino, lo que puede llevar a situaciones desagradables y, en algunos casos, a una perspectiva no tan buena de la marihuana.

Pero esto no tiene por qué ser así. A continuación, explicamos cómo fumar marihuana correctamente. Debería servir como un simple recordatorio de lo que se debe y no se debe hacer con el cannabis recreativo, para que tú y tus colegas fumetas podáis hacer que la experiencia siempre sea positiva. Además, te ofrecemos algunos consejos útiles para evitar la tos intensa durante una fumada.

How to Smoke Weed

El protocolo al consumir marihuana puede mejorar o arruinar la experiencia cannábica

Adquirir un buen protocolo al consumir marihuana puede mejorar notablemente tu experiencia cannábica y la de los que te rodean. No te estamos diciendo que hagas una reverencia al entrar en la habitación o que bajo ningún concepto pongas los codos sobre la mesa cuando estés poniendo remedio a tu ataque de munchies. Más bien, queremos mostrar una lista de modales básicos para guardar el respeto entre fumetas. Sigue leyendo y descubre cómo hacer de cada fumada una experiencia más agradable.

  • Trae tu propia hierba

Si te invitan a una fiesta con marihuana, se espera que aportes algo. Deberías venir con al menos una de estas dos cosas: tu propio material (a poder ser de una variedad diferente) o algo para picar cuando os entre el hambre.

  • Cuida de quienes hayan fumado demasiado

Si alguna vez te has pillado un “blancazo”, sabes perfectamente que es una experiencia realmente desagradable. Aunque hay poquísimas probabilidades de que se produzca una verdadera sobredosis de marihuana, si se consume demasiado THC, se pueden experimentar efectos secundarios bastante desagradables, como náuseas, temblores y aturdimiento. Con el objetivo de tratar a los demás como te gustaría que te trataran a ti, cuida de cualquiera que se encuentre en esta situación, tanto si es un desconocido en un festival o un colega en tu sofá.

  • Colabora siempre que puedas

¡Los porros no se lían solos! Durante las fumadas, colabora en todo lo que puedas. Cuando todo el mundo participa en las tareas, al final el grupo se convierte en una máquina perfectamente engrasada que produce petas perfectos. Ofrécete para preparar los filtros, picar la hierba o proteger del viento las manos llenas de hierba de tu colega.

  • No saques temas demasiado serios

Cuando estés de fumada, intenta hablar de cosas alegres. Hay personas que se meten de lleno en temas super filosóficos mientras se fuman un porro detrás de otro. Y por otro lado, hay gente que estando sobria no soporta conversaciones trascendentales, y mucho menos después de un porro. Salvo que conozcas muy bien a la gente que está contigo y sepas de qué le gusta hablar cuando fumáis, procura ser un pelín superficial y disfruta de otro modo de la compañía de los demás. Lo mismo pasa con temas personales delicados y con dar malas noticias, ya que podría provocar que una persona entre rápidamente en un bucle que al final termine en un estado de pánico.

  • Respetar la tolerancia de cada persona

Existe una especie de cultura “competitiva” en algunos círculos de fumadores de hierba, en la que intentan establecer una jerarquía basada en quién puede dar las caladas más profundas, quién aguanta durante más tiempo o quién fuma más. Pues bien, no vayas de gallito. Cada uno tiene una composición genética diferente y distintos niveles de asimilación del THC; Ambos factores determinan el nivel de tolerancia. Deja que cada uno fume lo que quiera, ya sea mucho o poco, y que disfrute de la experiencia.

  • No hagas comentarios sobre los munchies de nadie

Fumar marihuana suele dar lugar a una experiencia bastante previsible: la gente fuma, se coloca y luego le viene un hambre voraz, después vuelve a fumar o se echa una siesta. Los munchies son algo muy frecuente entre fumetas. Algunas personas se sacian con cualquier cosa que pillan, pero otras no paran de comer hasta vaciar la despensa. La comida puede ser un tema delicado para algunas personas, así que es mejor que observes cómo se desarrolla el fenómeno sin decir absolutamente nada.

  • El mechero no se roba

La epidemia de robos de mecheros sigue haciendo estragos en los círculos de fumetas a nivel internacional, y no parece que vaya a cesar. Los fumetas ingeniosos han probado varias soluciones, incluso poner mecheros comunitarios o modelos gigantescos difíciles de perder, pero nada funciona. Salvo que decidas atar el mechero a la mesa, no tengas esperanzas de no perderlo en algún momento. Por supuesto, la mayoría de las veces sucede por error, pero para que no te guardes el mechero de nadie en el bolsillo sin darte cuenta, esfuérzate y tenlo muy presente. Enciéndete el porro y suelta el mechero antes de empezar una conversación infinita sobre física cuántica o lo que sea.

  • No eches el humo a la cara de tus mascotas

Si alguna vez se te ha pasado por la cabeza colocar a tu mascota, es muy probable que tu herencia genética neandertal sea superior a la media. Las mascotas no pueden dar su consentimiento para drogarse, y varias especies domésticas pueden enfermar gravemente por intoxicación de THC. Si ves indicios de algún descerebrado que intenta burlarse gratuitamente de un animal, intervén y no dejes que lo haga. También es muy importante controlar no haber dejado comestibles por ahí sueltos, si quieres evitar visitas de urgencia al veterinario estando colocado.

  • Actúa con responsabilidad en los estados donde la marihuana recreativa es legal

Incluso en países y estados donde la marihuana recreativa es legal, siguen existiendo leyes que prohíben el consumo de hierba en público y cerca de escuelas. Si vas a salir de casa con un porro, estudia bien las leyes locales y sé consciente de las posibles consecuencias.

  • Mantener la seguridad de los niños

No hace falta decir que no hay que consumir marihuana cerca de los niños. Si tú o tus amigos tenéis niños en casa, buscaros un sitio alejado y dejarles bajo la supervisión de un adulto de confianza mientras no estéis. Al igual que con las mascotas, también hay que asegurarse de guardar correctamente los comestibles de marihuana. Estos productos atraen a los niños por naturaleza. Si por cualquier motivo lo ingieren, terminaréis en urgencias.

  • Respeta a tus compañeros de piso

No todo el mundo quiere que su casa huela constantemente a terpenos y compuestos volátiles de azufre, dos clases de moléculas responsables del intenso aroma de la marihuana. Si vives con otras personas que no aprueban la situación, debes llegar a un acuerdo. Pregúntales si puedes probar métodos para eliminar los olores, como sploofs o filtros de aire de alta eficiencia. Y si esto no funciona o rechazan tu propuesta, te quedan dos opciones: mudarte o fumar fuera de casa.

Por otro lado, ¡a lo mejor tienes la suerte de tener un compañero de piso amante de la marihuana! En este caso, trabaja para cultivar una buena relación de respeto. ¡Comparte la hierba cuando se acabe y no le quites nada sin decírselo!

  • Pregunta antes de terminar un porro

¿Alguien ha tenido la amabilidad de compartir su hierba contigo? Bueno, ¡pues agradéceselo con tus actos! No te quedes con el porro durante mucho tiempo, no le des caladas demasiado largas cada vez que te lo pasan y pregunta si puedes terminarte el porro en lugar de darlo por hecho.

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Cómo fumar hierba correctamente

Vayamos directamente al grano... Esta sección se centra en el protocolo adecuado para fumar. Ten en cuenta estos consejos antes de asistir a tu próxima fumada en grupo.

  • Si cultivas tu propia hierba, compártela con todo el mundo

Ahora bien, si cultivas tus propias reservas, sería un buen detalle que las compartieras con los demás. Esto pondrá a prueba tanto tus habilidades para cultivar como para recortar y curar.

  • Lía, si dominas el arte

Si ya dominas el arte de liar un porro, anímate y ofrécete como voluntario. Pero asegúrate de que eres capaz de hacer un trabajo decente. Aunque todos fuimos principiantes, no sirve de nada perder tiempo, hierba y papel a costa de los demás. Si se te da mal, déjalo en manos de los que sí pueden.

  • Exige buen papel

Para conseguir la mejor experiencia, necesitas las mejores herramientas. Desde un papel de liar de primera calidad hasta un mechero que funcione bien, todo forma parte del pack. Así que no te conformes con materiales de mala calidad, sobre todo en lo que respecta al papel.

  • Conoce tus derechos como liador

Si te has esforzado en liar un porro perfecto, se te concede el honor de encenderlo. Son reglas que todo el mundo ha seguido desde tiempos inmemoriales. Romperlas sería un pecado.

  • Puff, puff, pásalo

El título por sí solo debería ser suficiente explicación. Tienes un máximo de dos caladas antes de pasarlo a la siguiente persona. No acapares el porro.

  • Mantén tu saliva a raya

Pasar un porro también significa intercambiar un poco de saliva con la gente. Aun así, ten la decencia de mantener los niveles de humedad al mínimo. No solo afecta a la boquilla, sino que es simplemente asqueroso.

  • Empieza a liar otro porro antes de que se acabe

Si quieres mantener el buen ritmo durante toda la noche, presta atención. Cuando veas que ese porro se hace cada vez más pequeño, prepárate para liar otro.

  • Intenta que no se te caiga ceniza

Para minimizar el trabajo de limpieza, ten cuidado con la ceniza. No olvides tener un cenicero, o al menos una papelera, a tu lado para recoger la ceniza sin ensuciar.

  • Pásalo de la forma adecuada

Cuando pases un porro, debes hacerlo con el lado del filtro apuntando hacia la siguiente persona. Así les resultará más fácil cogerlo. No cometas el error de pasarlo con el lado encendido hacia delante.

Protocolo al ingerir comestibles de marihuana

Los comestibles son una liga totalmente diferente a la de fumar marihuana. ¡Te contamos las principales reglas sobre el protocolo de los comestibles!

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  • No des comestibles a alguien sin decírselo primero

Puede parecer una broma graciosa, pero ten por seguro que puede llegar a romper una amistad si la cosa acaba mal. Antes de dar un comestible a alguien, pídele su consentimiento. Las galletas y los brownies de marihuana son productos muy potentes y pueden dar lugar a experiencias muy desagradables para quienes no estén preparados.

  • No subestimes los comestibles

Si vas a preparar una tanda de comestibles caseros, asegúrate de hacerlo correctamente para evitar ingerir demasiado THC por error. Calcula las cantidades con nuestra calculadora de dosis y evitarás malos ratos para ti y los demás.

  • Identifica tu tolerancia

Antes de consumir algo demasiado fuerte, debes descubrir cómo responde tu cuerpo a los comestibles. Aunque estés acostumbrado a fumar mucha hierba, los comestibles tienen un efecto muy diferente en el cuerpo y la mente. Empieza poco a poco y ve subiendo la dosis progresivamente.

  • Comparte

Los comestibles son una forma única de consumir marihuana, especialmente si los preparas tú. Después de pasar horas en la cocina preparando una nueva receta o una tanda de cápsulas, ¡querrás compartir el resultado con más gente! Y nunca se sabe, a lo mejor alguien te devuelve el favor en otra ocasión.

  • Etiqueta tus productos

Independientemente de si vas a un festival, a una fiesta, o a una simple quedada para fumar un rato, lleva todo tu material etiquetado. Así, podrás hacer un seguimiento de tus cosas y, sobre todo, dejarás claro a la gente que son comestibles psicoactivos.

¿Por qué la marihuana provoca tos?

Cuando cualquier forma de humo entra en los pulmones, la tos es una reacción natural: es la respuesta de nuestro cuerpo a posibles irritantes. Los expertos te dirán que la tos en realidad es un mecanismo de protección para ayudar a expulsar las sustancias nocivas y dejar entrar el aire.

Dicho esto, es importante tener en cuenta que la tos leve y temporal es algo natural cuando se fuma hierba. Tu garganta podría estar seca e irritada, y de ahí la reacción.

Si tienes una tos persistente o severa cada vez que fumas, quizás sea conveniente que consultes a un médico.

Aunque es posible que sigas tosiendo de vez en cuando, si buscas formas de evitar la tos durante tus fumadas, ten en cuenta los siguientes aspectos.

  • Cuida la hidratación

Si ves que toses mucho durante una fumada, es probable que tu garganta esté seca. Hazte un favor y mantén la hidratación. Un poco de zumo o una bebida energética pueden servir, pero no hay nada mejor que el agua.

  • Consigue hierba de buena calidad

Si una determinada variedad os provoca una tos grave a ti y a tus compañeros, podría ser que la hierba estuviera mal cultivada o curada. Si los cogollos se trataron con productos químicos o se expusieron a demasiada humedad, lo mejor es ir sobre seguro y cambiarla por hierba de buena calidad.

  • Evita los tallos o las semillas

Este es otro signo de hierba de mala calidad que te hará toser. Las semillas y los tallos no solo hacen que el humo sea desagradable, sino que acabas pagando de más por un cannabis que ni siquiera te coloca. Si te encuentras con un paquete lleno de tallos, recházalo.

  • Usa papel de calidad

Hoy en día, encontrarás papel de liar hecho de cáñamo y otras fibras sin blanquear ni refinar. Evita usar papel para cigarrillos o cualquier otro que no esté hecho específicamente para liar porros, ya que es probable que sea más agresivo para los pulmones.

  • Pica bien los cogollos

Esto no necesita explicación. La hierba bien molida te proporcionará una experiencia más suave y con menos humo. Lo cual también significa menos tos, que es el objetivo de este apartado.

  • Lía como un pro

Un porro mal liado puede hacerte toser, incluso si el material utilizado para hacerlo es de gran calidad. Asegúrate de que tu porro está suficientemente compactado, pero no demasiado, para conseguir una combustión suave y uniforme. Además, tienes la posibilidad de quemar el papel sobrante después de liarlo para reducir la cantidad que inhalas.

  • No mezcles con tabaco

Si quieres que tus fumadas sean relativamente más saludables, olvídate del tabaco. Es una sustancia química que puede poner en peligro tus pulmones y, en última instancia, hacerte toser.

  • No inhales mientras enciendes

Esa primera chispa tendrá un humo fuerte, y una vez que empieces a inhalar, irá directamente a tus pulmones. Después de esa primera calada, a nadie le apetece seguir fumando durante unos minutos.

  • Da pequeñas caladas

Especialmente si estás en un grupo grande, da caladas más pequeñas. No solo es lo más respetuoso, sino que también evitas inhalar demasiado y toser.

  • No aguantes el humo

Aguantar el humo no te hará colocarte más. Ese subidón cerebral extra que puedes sentir es tu cuerpo diciéndote que te falta oxígeno. Deja esta costumbre absurda.

  • Prueba el vapeo o los comestibles durante un tiempo

Una de las razones más probables por las que estás tosiendo mucho es por tu método de consumo preferido. Olvídate de fumar durante un tiempo y opta por la vaporización, o incluso por los comestibles.

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Protocolo al fumar hierba en bong y vaporizador

Hasta ahora, hemos hablado de fumar porros y comer comestibles. A continuación, pasaremos al tema de bongs y vaporizadores. ¡Vamos con ello!

  • No pases el bong con humo viejo

No dejes humo viejo y desagradable en el bong antes de pasarlo al siguiente de la fila. Termina la calada o deja salir el exceso de humo por el orificio carburador. A nadie le gusta que le pasen un rig lleno de humo sucio.

  • No seas manazas

Si te pasan un rig gigantesco, tómate las cosas con calma y sin prisas. No solo son caros, sino que además, algunos están hechos a mano y son piezas únicas. No hay nada peor para terminar con el buen rollo de una fumada que romper el bong de un colega en mil pedazos.

  • Fuma con responsabilidad

¡No desperdicies hierba! Hay cazoletas con muy poca capacidad y otras son más amplias y profundas. Si no diriges la llama hacia el centro de la cazoleta, no conseguirás una combustión uniforme. Para aprovechar cada calada al máximo, mueve el mechero por toda la superficie de la cazoleta.

Protocolo para fumar marihuana en fiestas

Y después de comentar los varios protocolos según cada método de consumo de marihuana, vamos a ver las reglas básicas en los entornos sociales.

  • Pedir permiso

Alguien ha dedicado parte de su tiempo y esfuerzo a organizar una fiesta, y además ha tenido el detalle de invitarte. Lo último que querrías es hacerle un feo y amargarle la fiesta fumando hierba sin su permiso. Hay que preguntar antes. Y no des por hecho que basta con salir de la casa y hacerlo al otro lado de la puerta.

  • Respeta a los no fumadores

Muchas personas simplemente deciden no fumar marihuana, pero es que hay algunas que en realidad no soportan el olor. Si estás en una fiesta, no es plan de ir preguntando uno por uno lo que opinan sobre el consumo de marihuana. Así que, cuando vayas a fumar, aléjate del grupo tranquilamente y cuando termines, vuelve, con tus ojos rojos y libre de preocupaciones.

  • Actúa de manera inclusiva y con discreción

No des por hecho que toda la gente que no conoces en la fiesta no quiere fumar. ¡Porque perderás la oportunidad de construir grandes relaciones! Invita a la gente que según tu instinto podrían aceptarla con gusto, luego búscate un sitio discreto donde fumar y evitar miradas indiscretas, e incluso posibles conflictos.

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Protocolo al fumar hierba en un concierto

Vas a ir a ver a uno de tus grupos favoritos, pero ¿tienes que llevar los bolsillos llenos de hierba a la fuerza? A continuación te contamos el protocolo para consumir hierba en un festival.

  • Observa tu alrededor

¿Vas a estar en una sala pequeña o en un estadio enorme al aire libre? Evidentemente, fumar será más fácil en un sitio que en otro. Si estás en una sala pequeña, sal a la calle cuando quieras fumar. También tienes que conocer el tipo de público. Si vas a un concierto de música reggae no tendrás muchos problemas para perderte en una nube de hierba, pero es mucho menos probable que suceda lo mismo en un concierto de Ariana Grande, por ejemplo.

  • Pasa el porro con cuidado

Te estás moviendo al ritmo de la música. La hierba y la música están haciendo un buen equipo y de repente te sientes súper generoso. Bien, antes de empezar a pasar un porro enorme a todo el mundo, analiza tu entorno. ¿Está la cosa tranquila y hay buen rollo entre la gente, o hay cierto caos y alboroto? ¿Hay probabilidades de recuperar el porro o se perderá entre la multitud?

  • Cuidado con la seguridad

El personal de seguridad de los festivales está muy acostumbrado a sentir olor a marihuana y ver gente fumando sin parar. Pero no te pases de listo. Respeta a la gente que está trabajando, y por lo menos sal de su campo visual antes de darles una razón para actuar.

Ten en cuenta estos consejos para fumar hierba

Como fumador con experiencia, puede que ya conozcas estos consejos. Pero si eres principiante, muchas de estas cosas pueden ser información nueva. En todo caso, independientemente de tu nivel, siempre vale la pena tener en cuenta estos consejos, ¡y todos necesitamos un pequeño recordatorio de vez en cuando!

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